Trucos para pasar la ITV
Todas las personas que tienen un coche saben que existe un día al año en el que no se puede fallar, y ese día es la inspección de la ITV. Un trámite que a veces puede generar estrés, duda por no superarlo y en el que a veces se pierde mucho tiempo esperando.
¿Cómo pasar la ITV de forma rápida?
Lo primero que hay que hacer es ver dónde llevarlo, a qué centro, no todos son iguales. Los hay más grandes, más pequeños, en los que trabajan más rápido, son más exigentes… Es algo que hay que tener en cuenta.
También hay que tener en cuenta la proximidad, que haya disponibilidad de citas y días de apertura, cada vez son más los centros los que aumentan sus horarios. De esta forma, al aumentar los horarios, se reducen los atascos y se consigue que haya menos clientes.
Incluso a día de hoy, se puede pasar la ITV antes de la fecha, es decir, no se pierden los días. Sobre todo, hay que saber seleccionar los días y horarios en los que no haya mucha espera, así como a primera hora del día o a partir de las 18:00 de la tarde.
Realizar una pequeña inspección pre- ITV
Para ir más seguro a la inspección de la ITV, se recomienda hacer una pequeña revisión del coche tú mismo.
Muchos de los defectos que se tiene suelen ser vistos a simple vista y, resulta que el 27,5% de los fallos está relacionado con el sistema de alumbrado. Es decir, algo muy necesario antes de llevar tu coche a la ITV es, revisar las luces del coche, aunque también es muy importante echarle un vistazo a los neumáticos y ver si cumple el mínimo legal, 1,6mm. Aunque también hay que tener en cuenta si los neumáticos presentan anomalías, rajas, los niveles del coche, los cinturones y su sistema de seguridad…
Otro de los defectos que más se ve a parte del sistema de alumbrado, es el sistema de suspensión y dirección. Primero, hay que dejar el coche estacionado y apoyándose en sus esquinas, se libera peso y se recupera su estado inicial en un movimiento de ascenso y descenso, sin oscilar repetidamente. Después, hay que girar las ruedas a tope y agacharse para comprobar el estado de las rótulas, el guardapolvos del pailer y los silentblocks. En ellos no debe haber restos de grasa, rajadas o cuarteadas.
Y por último hay que echar un vistazo rápido al sistema de frenado, que constituye un 12% de los defectos detectados. Se comprueba la tensión del freno de mano, manteniéndola.
Por último, si prefieres ahorrar todos los pasos anteriores, se puede acudir a un mecánico profesional para realizar la inspección pre – ITV asegurándote pasarla.
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